Cuando íbamos con taparrabos por la selva, el estrés servía como mecanismo de defensa evolutivo c*j*udo: aparecía un león, te ponías a correr como si no hubiera un mañana y huías del peligro. 

Nuestro cerebro desde entonces no ha evolucionado mucho (o nada) pero las ‘amenazas percibidas sí’: voy a llegar tarde al curro, el jefe me va a echar la peta, tengo que terminar este informe, no voy a coger sitio bueno en el metro… “leones” por todas partes.

Nuestro cerebro desde entonces no ha evolucionado mucho (o nada) pero las ‘amenazas percibidas sí’: voy a llegar tarde al curro, el jefe me va a echar la peta, tengo que terminar este informe, no voy a coger sitio bueno en el metro… “leones” por todas partes.

En España que nos encanta presumir de estilo de vida tranquilo, resulta que ocupamos el séptimo lugar en la lista de naciones más estresadas a pesar de nuestra imagen de fiesta, siesta y buen vivir.

Hablando en plata, te han metido en la cabeza y te mola un poco el rollo de apuntarte más tareas en un día que llamadas de cabreados recibe la operadora de Vodafone. Autoexigencia, perfeccionismo, ‘yo también quiero’… . Tienes más cosas por hacer que tiempo disponible y por eso llegas a casa reventado-física y mentalmente. 

Una vez en casa no te queda energía ni para tu pareja, ni para tu ficus, ni para ti. ¿Qué haces? Recurrir a series, redes sociales…salvavidas modernos modo recovery y ahorro de batería ON para no pensar, no sentir y reclamar de manera inconsciente ‘tiempo para ti’ que no has tenido hasta ahora. Aquí todo vale: un like en redes, recoger la cosecha en tu juego de móvil preferido, … cualquier gratificación inmediata te hace el apaño. 

Una vez en casa no te queda energía ni para tu pareja, ni para tu ficus, ni para ti. ¿Qué haces? Recurrir a series, redes sociales…salvavidas modernos modo recovery y ahorro de batería ON para no pensar, no sentir y reclamar de manera inconsciente ‘tiempo para ti’ que no has tenido hasta ahora. Aquí todo vale: un like en redes, recoger la cosecha en tu juego de móvil preferido, … cualquier gratificación inmediata te hace el apaño. 

Te acostaste tarde y no has dormido bien. ¿solución para ser nuevamente productivo? cafeína, nootrópicos, ducha de agua fría… incluso de otras cositas (como le diría Olvido Hormigos a Belén Esteban) como remedios para asegurar la maximización del rendimiento y el silencio del alma.

Fin de semana, rato libre… prueba a no hacer NADA. Ni podcasts, ni restaurante, ni hobby, ni tocar el móvil. Deja que los niños se aburran (dice un artículo del Times) que eso solo trae creatividad y cosas buenas.

La próxima vez que escribas una lista de tareas en el móvil, post-it o agenda, añade al lado una estimación del tiempo que te va a llevar (y fijo que vas a ser demasiado generoso). Cuando la suma pase de 8 horas... pues toca quitar algo (que no sea dormir, claro está). 

La próxima vez que escribas una lista de tareas en el móvil, post-it o agenda, añade al lado una estimación del tiempo que te va a llevar (y fijo que vas a ser demasiado generoso). Cuando la suma pase de 8 horas... pues toca quitar algo (que no sea dormir, claro está). 

Lo contrario al estrés NO es la relajación y NO es la actividad concentrada. Es poder transitar estados de jarana y bajona sin empujarlos al fondo e ignorarlos. Relajarse y desconectar puede ser un medio … pero para otro fin: simplemente ser capaz de ESTAR con un sentimiento sin desviar la atención.